miércoles, 30 de enero de 2013

Zeugnisfgerien y "juegos" didácticos

Me encantan mis alumnos.

Hoy empiezan las Zeugnisferien, que se puede traducir como "las vacaciones de las notas", son las vacaciones que hay justo después de dar las notas y separan el primer semestre del segundo. (En Alemania, sólo hay dos evaluaciones, una hasta enero y la otra a partir de febrero, no tres como en España: hasta Navidad, hasta Semana Santa y hasta el final). Aunque en realidad, estas vacaciones duran desde mañana hasta... pasado mañana. Las llaman vacaciones y no lo son, es un puente. Sin embargo hoy intentando explicárselo a mis alumnos no entraban en razón.
*Afra: Also, gutes langes Wochenende!
Schulerin (sehr empört): Das ist aber kein langes Wochenende, sie sind doch Ferien.
Menos mal que al menos en la sala de profesores sí son conscientes de la realidad y se han despedido con un "¡Buen fin de semana!".
Eso sí, no serán vacaciones, pero yo me voy a España. No es que me haya entrado un arrebato de nostalgia que tenga que calmar de forma fulminante, que no es el caso. Es que me voy de boda. Ámsterdam-Madrid el viernes, boda el sábado, Madrid-Ámsterdam el domingo y el lunes a las seis y diez en planta, que las vacaciones se acaban pronto. Me espera un febrero movidito (y un marzo también, aunque un poco menos), pero como sarna con gusto no pica, me alegro un montón de lo reventado que voy a estar cuando me suene el despertador el 25 de febrero.

Lo de las Zeugnisferien es en realidad una consecuencia de que los alumnos sean bastante crédulos, tú les dices algo y se lo creen a pies juntillas, sin pararse a pensar que lo mismo les estás vacilando. Así que me he aprovechado de esa característica de mis alumnos. Hoy hemos hecho un juego (que tiene de juego tanto como las Zeugnisferien tienen de vacaciones) consistente en que uno pensaba una palabra del vocabulario de las dos últimas lecciones, la definía sin nombrarla y el resto tenía que averiguar de qué palabra se trataba. Lo que viene siendo un test de vocabulario. Lo han flipado con el juego, les ha encantado. Pero el que más ha flipado he sido yo; lo llego a saber y lo hacemos cada día para empezar la clase.

PD: Me llena de orgullo y satisfacción dedicarle mi entrada número 300 a mis alumnos.

*Afra: Que tengáis buen puente/finde largo.
Alumna (tó indigná): No es un puente, son vacaciones.

lunes, 21 de enero de 2013

347 días - A Song of Ice and Fire

En los últimos 347 días he hecho muchas cosas, entre ellas leerme los cinco libros publicados hasta ahora de  Canción de Hielo y Fuego (en los que se basa la serie de Juego de Tronos). ¿He tardado demasiado tiempo? Sin duda alguna.

Pero no creáis que he tardado porque no me hayan gustado los libros, de hecho me han gustado mucho. Se nota que su autor sabe lo que hace, sabe perfectamente donde parar un capítulo para que quieras seguir leyendo, además como cada capítulo está contado desde el punto de vista de un personaje (eso no significa que el personaje sea le narrador, aunque el narrador es en tercera persona, el personaje que toque es el protagonista y por tanto todo gira en torno a él) hay varios frentes abiertos que se entrelazan y si no fuera porque cada libro tiene más de mil páginas de media, me los habría leído de una sentada... o no.

A pesar de habérmelos leído en inglés (lengua que debería dominar mucho mejor de lo que lo hago), son unos libros relativamente fáciles de leer, prueba de ello es que sólo me habré leído un tercio del total estando exclusivamente leyendo. ¿Qué quiero decir con esto? Si leéis las entradas entre el 8 de febrero, que me los empecé, y ayer, que me los terminé, seguramente lo que más hay son entradas de viajes. Pues eso es lo que quiero decir, que la mayor parte me la he leído mientras iba en el tren o el avión o esperando en la estación o el aeropuerto, rodeado de gente que iba hablando y estando pendiente de no pasarme la parada. Por eso cuando me compré el quinto libro en amazon y me llegó uno grande de pasta dura, lo primero que hice fue comprarme otra edición en pasta blanda (lo que me recuerda que tengo que revender el de la pasta dura ¿a alguien le interesa por diez euros más gastos de envío?).

Pero no siempre son los libros interesantes. Por ejemplo durante el primer y parte del segundo libro cada vez que la acción se trasladaba Essos o a Winterfell (sobre todo después de que Catelyn saliera) me aburría soberanamente, pero luego vi que simplemente estaban introduciendo una trama que después mejoraría mucho.

Pero entender la trama tiene ciertas complicaciones (no son dificultades, pero hay que estar atento): personajes y lugares.
Los lugares. Es un mundo ficticio, aunque con algunas similitudes con Europa, por ejemplo, cuando hablan de Dorne no puedo dejar de pensar en Andalucía, no la Andalucía de verdad, sino la que los europeos se imaginan desde el siglo XIX, la que nosotros nos imaginamos cuando hablamos de Medina Azahara; cuando hablan de Essos y nombran a los personajes oriundos de allí, pienso en Turquía; cuando vemos lo que hay más allá del muro y los personajes que viven allí, me vienen a la mente Escandinavia y los Vikingos. Los mapas que hay al principio de cada libro ayudan, pero aún así es imposible no perderse o estar continuamente volviendo al principio para ver dónde se desarrolla la acción.
Hay una cantidad enorme de personajes, a los que además, como en la vida real, no siempre se les llama de la misma forma, a veces por el nombre, otras por el apellido, otras por el mote, etc. eso es un mérito increíble por parte del autor, controlar a tanta gente y no caer en contradicciones, pero también te hace estar pensando continuamente "¿quién coño es este tío y de qué me suena su nombre?" y si encima eres despistado, como yo, pues complicación añadida.

Y hablando de personajes, algo que me sorprendió gratamente al principio es que los personajes no suelen ser planos, es muy difícil separar entre buenos y malos.
Hay poca gente a la que no le guste Ned Stark y casi nadie diría que es malo; y no creo que haya nadie a quien le caigan bien Viserys o Joffrey, pero aparte de esos tres personajes (y los Bolton y poco más), el resto pueden caer bien o caer mal. Por ejemplo Cersei a mí me cae como el culo, la odio y cuando la maten (porque aquí matan hasta al apuntador) me va a encantar, pero sé que hay gente a la que le encanta; Catelyn me gustaba (al principio no, luego sí, y después vuelve a no gustarme), pero hay gente que no la traga. Y luego hay una constelación de personajes que no sé si me gustan o no porque no sé de qué pie cojean: Theon Greyjoy, Melissandre (que al principio no, y luego un poco), Varys. Mis favoritos sin ninguna duda son Tyrion y Arya, aunque si algo he aprendido leyendo los libros es que es mejor no cogerle demasiado cariño a ningún personaje.

No quería empezar a ver la serie hasta que no me hubiera acabado los cinco libros; pero por avatares del destino, este fin de semana he visto los cinco primeros capítulos, sin embargo apenas me quedaban cien páginas por leer (¡y menudas páginas!), así que puedo estar contento.

Ahora a esperar a que salga el sexto, ojalá no le de un infarto a GRR Martin antes de acabar.

Y mientras tanto ya tengo bastante material para futuras entradas...
... más todo lo que tengo en el ebook.

martes, 15 de enero de 2013

La granja escuerta

Esta semana estoy un poco hasta arriba corrigiendo exámenes. Mi último grupo (el único que me queda por acabar de corregir y devolver el examen) hizo el examen ayer y tengo que tener las notas de la evaluación listas pasado mañana, así que tengo la creatividad para el blog un poco aparcada esta semana. Sin embargo, a pesar de que podría hablar de la vuelta del Zweiräderarmee (entre cuyas filas los españoles tenemos cada vez más peso... debido a deserciones teutonas principalmente), de cualquiera de los dos libros que me estoy leyendo (lo haré cuando los termine, si todo va bien antes del jueves, acabando así con todas las existencias de libros en inglés que tengo por aquí ¿recomendaciones?) o de los planes para la semana; hoy voy a dejar que la entrada la escriba una de mis alumnas. En concreto el ejercicio segundo de los exámenes que estoy corrigiendo hoy, el de expresión escrita.

El enunciado decía: Imagina que estuviste un año estudiando o haciendo un voluntariado en el extranjero. Cuenta cómo era tu vida allí, habla de un excursión, el tiempo, etc. Escribe más de 200 palabras.

Lo que yo quería era que usaran el imperfecto y el indefinido en un contexto relativamente realista. Lo que esta querida alumna mía escribió fue (mis comentarios en negrita):
El año 2012 era en el extranjero. Era en La Virginia. Buscaba una granja escuerta (aquí yo empecé a fliparlo ¿quién le ha enseñado a esta niño niña lo que es una granja-escuela) por que me encanta los caballos y por eso queriba hacer muchas cosas con caballos. Por suerte estuve en La Virginia a una granja escuerta (esto me suena) "Happy Horses" y la vida estuvaba (no sé si aquí toca imperfecto o indefinido, así que los mezclo y el profesor que elija el que quiera) muy muy bien! 
Hice diez y ocho años (¿cómo se hacen los años?). Y el día que yo iba con el aeropuerto a La Virginia, el tiempo hacía mucho calor - hacía sol. Que bonita! Pues... mientras yo entriba en el purto (¿dónde entrabas?), sonó mi teléfono. Estuvó mi familia. Mi madre querío hablar con mí. Claro! (Encima de que no te llevan al aeropuerto, te llaman cuando vas a entrar en el purto).
En La Virginia el tiempo hacía menos calor. Pero hacía veinte grados. Me guste el tiempo. 
La granja escuerta (no es granja-escuela, cuando veáis lo que quiere decir lo vais a flipar) estaba muy grande y bonita. El techo estaba rojo (lo más importante de la granja es el techo, claro) y el otro estaba marrón y blanco (¿qué había? ¿dos techos?). En La cuerta (para no existir hay que ver lo que le gusta esta palabra) con la cerca estaban muchos caballos y dos caballos galoparon. (No sé vosotros, pero yo esto no sé por donde cogerlo, a pesar de que sabe que "cerca" significa "valla"... o yo soy demasiado benévolo) 
Despúes quede con el jefe de la granja escuerta. Llevo Samuel y fue muy sympatico. 
A de más Samuel me explico todo sobre de el día normal (menos mal que no te explicó los festivos). Me gustaba el día normal. entonces sababa, que yo teniba que hacer todo los días. (He necesitado leer tres veces para saber qué quiere decir)
Samuel dico: "Pues Katharina, ahora tienes que saber todo. Puedes ir a los caballos y puede decir Hola J". (La alumna que susurraba al oído de los caballos. Y sí, la carita feliz estaba en la redacción del examen) Y cuando terminaba, fui a los caballos bonitas. 
Por la noche dormiba. Los días normales teniba que desechar. No estuvo super bien pero haciba eso todos los días por los caballos. (¡Hay que ver como se sacrifica por los caballos que desechaba todos los días!)
Cuando iba en Alemania, estuve muy triste, por que echa de menos a los caballos y a la granja ecuestre (Aquí se ha equivocado y ha escrito ecuestre, en lugar de escuerta, un fallo lo tiene cualquiera).
Esto me lleva a pensar ¿cuántas veces habré perpetrado yo redacciones parecidas en inglés, alemán o francés?

viernes, 11 de enero de 2013

Volviendo a la rutina

Y poco a poco, casi sin darme cuenta ya ha pasado la primera semana de vuelta en Osna. Lo malo de volver a la rutina son esas pequeñas que haces automáticamente, y a las que después de las vacaciones te tienes que volver a acostumbrar.

Por ejemplo, ayer volví al gimnasio después de casi un mes (exactamente 27 días) rascándome la barriga. Al principio fue bien, pero hubo un momento en que por poco me dio un tirón en la parte baja de los michelines, en serio ¿te puede dar un tirón ahí? Yo pasé un momento de tensión, es como cuando estás durmiendo y te da un tirón en el gemelo y te tienes que poner a andar para que se te pase, pues igual, pero no me iba a tirar al suelo del gimnasio y ponerme a reptar como una anaconda, menos mal que al final no fue nada y pude seguir dale que te pego, porque vaya perfil hitchcockeriano que se me ha puesto.

Hoy he vuelto a clase de árabe. Antes de Navidad era uno de los mejores de la clase, pero falté a la última clase porque estaba en Stuttgart y ¡cómo se nota! Incluso había letras que se me habían olvidado, hoy apenas podía leer palabras supersencillas, y casi no reconocía los nombres propios.

Eso sí, esta semana me ha pasado algo muy bueno que nunca pensé que me pasaría. Después de dos años y pico madrugando y sufriendo por madrugar, el otro día me levanté a las seis y cuarto de la mañana fresco como una rosa, desayuné, me duché y mucho antes que de costumbre ya estaba saliendo por la puerta, y así toda la semana. Al final va a resultar que eso de levantarse a la seis de la mañana va a ser más normal de lo que pensaba antes de venir a Alemania. A los alemanes por lo menos les parece lo más normal del mundo, es más, para ellos, levantarse a las siete de la mañana no es madrugar, es levantarse muy tarde. Una curiosidad sobre el idioma (que modela la mentalidad de los hablantes): en alemán no existe una palabra para "madrugar", para expresar ese concepto hay que decir "levantarse temprano" (früh aufstehen). El concepto existe, pero el hecho de que no haya una palabra (con todas sus connotaciones) le resta fuerza ¿O acaso me vais a decir que cuando oís "hoy he tenido que levantarme temprano" y "hoy he tenido que madrugar" la segunda opción no denota más fastidio e incluso que quien la dice se ha tenido que levantar antes que quien ha dicho la primera opción?

Y hablando de Alemania y rutinas. Una de mis rutinas es internet (intennneeeeeee) y soy relativamente activo en el Twitter, precisamente a través de Twitter me ha llegado un enlace a esta entrada de otro blog: http://javisarrio.com/2013/01/09/dos-casos-de-corrupcion-en-alemania/ Cuando estuve en España en Semana Santa coleaba todavía el escándalo del ex-presidente alemán Christian Wulff (paisano mío ahora que vivo en Osnabrück, por cierto), escándalo por el que dimitió/fue obligado a dimitir, lo que sirvió para dos cosas. La primera es que la mayoría de los españoles se enteraron de que en Alemania una persona es el Canciller (Jefe del Gobierno) y otra es el Presidente (Jefe de Estado); además está prohibido por la Constitución que la misma persona asuma los dos cargos, porque la última vez que eso ocurrió se lió MUY parda. La segunda cosa para la que sirvió fue para tener la siguiente conversación con mi hermana:

- Pero ¿a qué viene tanto escándalo? ¿qué hizo?
- En su época de Presidente de Niedersachsen, recibió un préstamo en condiciones extremadamente ventajosas de ciertos banqueros amigos suyos.
- Y ¿cuál es el problema?

El problema es que a los españoles nos parece normal que un político se aproveche de su posición de poder para recibir favores personales... favores que en algún momento tendrá que devolver, seguramente valiéndose de esa misma posición de poder.

Y ya para acabar, adivinad quién está reestrenando unos calcetines que ha heredado le han regalado esta Navidad.

lunes, 7 de enero de 2013

Objetivos 2013

Entrada clarísimamente inspirada en la de Morti.

Más que los típicos propósitos de año nuevo, prefiero marcarme objetivos, la diferencia está en que los propósitos son una meta un tanto abstracta y los objetivos tienen un camino relativamente claro marcado y unos pasos a seguir relativamente concretos para llegar a ellos.

- Perder cinco kilos. Pero no contando desde ahora, sino contando desde antes de esos tres y pico que me he traído a Alemania gracias a estar un mes sin ir al gimnasio y a pegarme las comilonas que me he pegado. Menos mal que Navidad es sólo una vez al año. Y sí, lo he copiado literalmente de Morti.
¿Cómo? Volviendo al gimnasio, aún los días que no tenga ganas y comiendo como estaba comiendo antes de las vacaciones. El día que me quede bien la ropa de antes de ir a Berlín habré cruzado el Rubicón.

- Escribir más en el blog (y en otras partes que no sean el estado de facebook o twitter) ¿Cómo? Con secciones fijas en el blog, por ejemplo comentando los libros que lea y las películas que vea (de series mejor no hablo porque llevo sin engancharme a una por lo menos tres años). Clarísimamente copiado de Molinos y sus libros encadenados.

- Volver a hacer fotos como si no hubiera un mañana (o al menos más que ahora). Me regalaron mi primera cámara digital en los Reyes del año que estuve en Berlín, en los ocho meses siguientes hasta que me volví a Córdoba hice literalmente miles y miles de fotos, desde que estoy en Osnabrück he hecho exactamente 303 fotos, pero 84 han sido de comida (o cocinando) o por encargo, aún así tengo que decir que hacer fotos a lo que cocino me ha puesto las pilas. ¿Cómo? Llevando la cámara encima a diario, como hacía en Berlín, nunca sabes donde va a estar esperándote una buena imagen.

- Quejarme menos de cosas que no merecen ninguna queja y quejarme más de las que sí la merecen. ¿Cómo? No tengo ni idea.

- Visitar diez sitios que no conozca ¿Cómo? El año pasado descubrí Calw, Bopfingen, Ibiza, el mar holandés a bordo de un barco, Neuschwanstein, Osnabrück, Bremen, Celle, Hannover, Braunschweig, la sala VIP del AVE de la estación de Atocha y alguna más que seguro que se me queda en el tintero. Para este año ya tengo viajes previstos a Barcelona en febrero (con excursiones varias) y Viena en marzo (y se me ha fastidiado uno a Malmö en mayo). Creo que éste será el objetivo más fácil.

Eso de prepararme las clases de toda la semana el fin de semana, tardar sólo una semana en devolver los exámenes corregidos y acostarme a una hora decente son propósitos de los que se hacen sabiendo que no se van a cumplir, así que mejor ni me lo pienso.

Dentro de algo menos de un año os diré qué tal me ha ido.

PD: No tiene mucho que ver con esta entrada, pero la primera foto del año ha sido del Christmas que más me ha emocionado del mundo mundial, no sólo escrito en exclusiva para mí, sino HECHO en exclusiva para mí.